Castración de gatos
La convivencia con ellos hace que a veces sea muy difícil de tolerar la emisión de olores de su orina en forma de spray que ellos realizan después de los 7 a 12 meses de edad. Este tipo de emisión urinaria a ellos les sirve para marcar territorio a los otros machos y para llamar la atención de las gatas y es coincidente con su madurez sexual.
Cuando el animal está viviendo afuera y viene a nuestra casa sólo a comer y dormir pasa prácticamente desapercibido este olor, pero cuando cohabita todo el día con nosotros, sin posibilidad de salir al exterior, es cuando se hace prácticamente imposible convivir con ellos sin verse uno obligado a castrarlos.
También pesa a favor de la decisión de castrarlos la cantidad de veces que ellos vuelven con heridas y contagios de infecciones, producto de las peleas que ellos tienen con otros gatos machos y que, si uno lo castra cuando son bien jóvenes y antes de que ellos empiecen con estas «salidas o excursiones nocturnas», se evita todo este tipo de trastornos sanitarios.